Los presagios matinales hacían mirar al cielo a los cofrades, quienes nos agarramos a un rayo de esperanza siempre. Fue esa esperanza en el radar metereológico lo que hizo que las hermandades del Domingo de Ramos, se hicieran a las calles de nuestra ciudad, tras retrasar toda la jornada una hora.
Algún susto en forma de llovizna se llevaron los cofrades de la Hermandad de Pasión, quienes hicieron un esfuerzo titánico por regalarnos la dulce mirada de su titular. Hay que destacar sin duda, el crecimiento de esta cofradía en esta jornada, sumando números de nazarenos en sus filas.
La Borriquita derrochó la alegría que solo llevan esos niños que abren nuestra Semana Santa. El conjunto del paso de misterio está quedando exquisito, debiendo destacar por encima de todo, el exorno floral de sus pasos -aunque especialmente lo hizo el de su paso de palio. Grandes momentos regaló la formación musical malagueña, Nuestro Padre Jesús Cautivo, quienes no pararon de adornar durante toda la tarde con sus sones el transcurrir de Cristo Rey.
El Perdón mantiene su línea inequívoca de que todo debe de evolucionar y esa evolución nace de los simientos que hace mas de cincuenta años marcaron sus fundadores. Gran acierto la inclusión de los candelabros para iluminar a tan peculiar imagen. Felicitar a la junta de gobierno que preside Eva Castañeda, que finaliza su mandato tras esta Semana Santa.
El bullicio que marcan las cofradías del Domingo de Ramos se plasma en dos hitos históricos, por un lado la alegría sobría de la Hermandad del Transporte y por otro la elegancia de la Hermandad de la Coronación. Momentos para masticar y regustarse nos regalaron.
Y como siempre el contrapunto del día. La Hermandad de las Angustias, que siempre nos regala ese momento para la reflexión silente, ante el paso de la Santísima Virgen, con un cortejo de nazarenos, que podemos atrevernos a destacar como uno de los mas bonitos de nuestra Semana Santa.
LO MEJOR
Lo mejor de esta jornada fue la mesura con la que las corporaciones de la jornada supieron marcar los tiempos.
LO PEOR
Lo peor fueron las gotas que cayeron a la Hermandad de Pasión, cuando transitaba por sus primeros metros de su recorrido
EL DETALLE
Las dos dolorosas de Sebastián Santos -Estrella y Madre de Dios de la Misericordia- se volvieron a encontrar frente a frente en la calle José Luís Díez, regalándonos uno de los momentos de la noche.
