Hace 175 días, empecé lo que espero sea de vuestro agrado. Vuelvo a repetir que no tengo ni la más mínima intención de agredir verbalmente a nadie, y si en mis comentarios, alguien se ve reflejado, es pura coincidencia ( quién se pica, ajos come ). Hoy quería llevar a estas líneas mi preocupación por el mundo de la flor cortada en nuestra tierra. No hace mucho, todos o casi todos lo negocios de Jerez y alrededores relacionados con la flores, tenían unos picos de ventas mayores en determinadas fechas del año. Para estos negocios en muchos casos, negocios familiares, marcaban en rojo los alrededores del hortera día de San Valentín, y sobre todo y debido al volumen, las semanas previas y la propia semana santa. Pues bueno, muy a pesar de ellos, ya pueden borrar lo de las ventas en cuaresma. Hemos pasado de un boom de flores, de auténticos jardines botánicos,, con todo tipo de flores, nacionales, internacionales, exóticas, etc, a una ausencia en muchas casos de las mismas, y en otros a un número rozando lo mínimo, lo ridículo. Eso sí, los señores que están arreglando ahora los pasos, pueden perfectamente hacer un belén gigante, o incluso si me apuran , darse un viajecito por Valencia ahora que estamos en Fallas.
Montes de corcho o similar material, espinas, cardos, yerbajos verdes, calaveras y todo para lo que antes eran flores. El libro de los gustos está en blanco como siempre digo, pero como también suelo decir, en todo este mundo, está casi todo inventado. Parece ya olvidado esos carteles de semana santa, con estampas de crucificados con un buen monte de claveles rojos, pero rojos de verdad, rojo sin experimentos de color sangre toro, que más bien parecen claveles estropeados. Pasos con lirios, gladiolos, yo ya no miro ni la cantidad ni si están mejor o peor puestos, pero es que de verdad, casi que ya no existen este tipo de exornos. Palios de claveles, de gladiolos ( ya hasta los añoro ), rosas blancas, azahar, azucenas. Estamos viendo también auténticos disparates en los cultos, en los besamanos y besapies, con piñas cónicas cuando se tratan de hermandades modernas y supuestamente de un corte alegre. Piñas de verdes sin sentido, hasta de espinas, y sin una sola flor. Por favor, estamos en Andalucía, nuestras semanas santas no están concebidas en ese formato, entiendo que en Burgos, puedan ser así, pero en Jerez, nuestras imágenes y el esplendor de nuestra semana santa debe ir acompañada de lo mejor que tengamos, además de considerar que no hay mejor regalo que una flor para lo que más queremos. Me imagino que el Señor cuando ve esas montañas rocosas, se pondrá un poco melancólico recordando años de flores, de olor a fresco.
Menos mal que es misericordioso y todo lo perdona. Cada cuál tendrá sus gustos, y estos son los mios, y de verdad, piensen en el negocio de la flor, que ya venden más claveles cualquier día del año para el San Judas de San Francisco, que en cuaresma para las hermandades. Pongan fin a todo este arsenal de rocas de cardos, y vayan a unos claveles bien puestos, que no hay nada más bonito para un palio o para un paso del Señor, que un buen exorno floral de claveles o de cualquier flor elegante, de las de toda la vida, con las cuales nos hemos criado y veíamos a nuestros titulares desde niños. Basta ya a tanta pena castellana, a tanto minimalismo y seamos más andaluces, más barrocos. En fin, ya saben, si alguien se ve reflejado, que sepa que es producto de su imaginación, nada de lo que yo tenga intención……