Alejandro Fernández.-Minutos antes de comenzar a escribir este artículo, se me ha encogido prácticamente el alma. Y lo digo, porque ha sido la puntilla que necesitaba para que mis humildes letras salieran opinando sobre una situación insostenible.
La cultura, aquella que tantas veces echamos en falta muchos de nosotros, va desapareciendo en pos de las «chalauras» que tenemos que ver a nuestro alrededor diariamente.
Leía hace unos minutos que el pasado sábado la Banda de Música «Gailín» de Puerto Serrano -que dirige mi amigo José Manuel García Pulido- bien pudo haber dado el último concierto de su historia. Sí, como lo oyen. Una formación con quince años de historia, asentada en el panorama musical andaluz, referente en muchos aspectos y además de todo eso, llevando el nombre de Puerto Serrano allá por donde pasan. ¿Que mas quieren?. ¡Si además posee una escuela musical en la que forman a todos sus componentes y de donde han nacido numerosos músicos! Ese es el nivel de nuestros dirigentes -sean del color que sean-. Sino que le pregunten a los músicos de la Banda «Fernando Guerrero» de Los Palacios, que han tenido que decir basta a una situación insostenible.
La música es cultura en general. Ya sea porque una banda toque marchas procesionales o pasodobles en una plaza de toros.
Pero aún hay más. A menos de un mes de la celebración de la festividad de nuestra patrona la Virgen de la Merced, debemos recordar que la Banda Municipal de Jerez de la Frontera fue disuelta por lo que ya no acompañó a la Custodia en el Corpus Christi.
¿Que pasara?
Lo que está claro es que ya seamos cofrades o no, debemos defender la cultura -la musical en este caso- recordando que los Font, Gamez, Braña, Peralto, Beigbeder entre otros, fueron músicos que regalaron cultura a nuestras corporaciones.
Foto: Luis Ayala Bustamente (Puerto Serrano de Cerca)