Las distintas corporaciones siguen adelante en su día a día, que no es otro que el apoyar a los más necesitados que sufren las consecuencias de una crisis donde no llega muchas veces ni los productos básicos.
A la iniciativa «Costaleros por nuestros mayores» se han unido muchas de las cofradías de la ciudad, ya sea a través de voluntarios como aportando económicamente. Muchas de ellas también se han centrado en el apoyo a los sanitarios y demás personas que necesitan protegerse frente al famoso virus realizando mascarillas algunas incluso utilizando los tejidos de sus propias túnicas de nazareno.
Nuestro aplauso va por todas y cada una de ellas. Cada una a su forma y aportando siempre lo que se les pide.
Esa es nuestra verdadera Estación de Penitencia en este 2020: la CARIDAD.