El curso 2020-21 da sus primeros coletazos y como siempre en estas fechas, nos suele traer la lectura que dan los sabios conocedores acerca del modelo de predicción meteorológica de las conocidas cabañuelas, unos datos que surgen de la observación del propio mes de agosto que finaliza y que da mediante un meticuloso estudio, los posibles pronósticos que se irán sucediendo cada mes.

Pues bien, acudiendo al cabañuelista Alfonso Cuenca -natural de Quesada, provincia de Jaén- hemos podido saber que este método habla de posibilidades de lluvia durante los días pasionales que comprenderán en 2021 del domingo 28 de marzo -de Ramos- al domingo 4 de abril -de Resurrección-.

Concretamente este estudioso del procedimiento augura que entre el 23 y el 30 de marzo, se producirá nubosidad abundante y lluvias generalizadas dejando una primera parte de la Semana Santa bastante complicada, aunque la segunda tampoco se salva de la «quema» puesto que entre el 1 y 7 de abril vaticina una climatología muy cambiante, ya que existen la posibilidad de sol con nubosidad variable y tormentosas, además de lluvias moderadas y tormentosas, afirmaciones que dan lugar a que no hay nada claro para esas jornadas.

Cabe destacar que la pasada Semana Santa -en la que estuvimos todos encerrados- no calló ni una gota, o al menos no hubiera complicado las distintas salidas procesionales de las cofradías, teniendo una primera parte de la Semana Santa sin sol pero con bastantes nubes y una segunda con nubosidad, algo que en cierto modo predijo el modelo propuesto por las cabañuelas.

Pues sí, siempre estamos pendientes a las cabañuelas pero este año además del tiempo, habrá que esperar la posibilidad de ver cofradías en la calle o no, puesto que la vacuna para ganarle la batalla al dichoso COVID-19 puede llegar al parecer, justo antes de los días pasionales y la normalidad anterior a la que disfrutamos ahora será palpable o no.