La Hermandad de la Soledad ha anunciado la reposición del histórico azulejo que ha servido siempre para que fieles, devotos y hermanos, recordaran a la dolorosa de la Porvera, aunque su templo se encontrara cerrado.
Una obra exquisita -de las mejores realizadas- salida de Cerámicas Santa Ana bajo la ejecución del artista Antonio Kierman Flores y fechado en el año 1944. Otra sevillana Isabel Parente, se ha encargado de la restauración del imponente retablo, cuyo resultado comprobaremos el próximo viernes al finalizar el tercer día del Triduo que comienza este miércoles 13, a partir de las 21 horas en la Iglesia de la Victoria, en honor a la imagen que realizara José Fernández Pomar.
El mismo quedará expuesto en el interior de la Casa de Hermandad, mientras que en la parte exterior se colocará una réplica.