Que el Sábado Santo la mayoría de los cofrades emigráramos a Sevilla es una realidad tan grande como verdadera. Pero también es una realidad que los cofrades de la Resurrección están trabajando para culminar la semana como Jerez se merece. Y eso se está notando poco a poco, aunque sabemos que el trabajo es un poco duro y complicado, puesto que a algunos parece que les da grima contemplar nazarenos tras perder a la Piedad de vista.
Han ganado enteros en todos los sentidos: horario de salida y cortejos compensado a partes iguales. Quizás a la corporación le falte un poco mas de itinerario para no llevar un ritmo que a veces se antoja demasiado lento, pero será cuestión de que finalicen las obras en la zona de la Plaza Belén.
En definitiva, un Domingo de Resurrección al cual le falta que los cofrades en masa nos echemos a la calle y recordemos que Cristo, muere y resucita para que todos lo hagamos con EL.