El acontecimiento histórico con el que el Cabildo Catedral ha honrado a la Cofradía del Rosario, a la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán y al Pueblo de Bornos en general, invitándolos a que la Sagrada Imagen de su Patrona presida la Solemnidad de la Inmaculada en la Santa Iglesia Catedral de Jerez, ha puesto de manifiesto su deseo e intención de abrir el primer templo jerezano al resto de realidades diocesanas, que forman también parte de esta parcela del Pueblo Santo de Dios.
Si para una cofradía ya cuesta trabajo sacar adelante cualquiera de sus actividades, para la Hermandad del Rosario de Bornos, que no hace ni un año que celebraba la ansiada Coronación Canónica de su Virgen -celebrada por todo lo alto- y que después de esa efemérides ya ha celebrado sus cultos de ‘La Rosa’ el pasado mes de mayo con Triduo, Función y procesión y también sus cultos patronales de octubre con Novena, Función, procesión y Octava y un Rosario de la Aurora semanal durante todo el mes del Rosario, llegar en peregrinación a Jerez con todo su pueblo supone un esfuerzo titánico que en ningún momento merma las ganas, sino que, por el contrario, las aumenta y refuerza.
Todo para la Virgen La Patrona de Bornos, en la Catedral de Jerez Otoño CofradeJerez 2022 parece poco y todo con la Virgen parece fácil, por muy difícil que sea. Una hermandad pequeña, con pocas posibilidades, pero con la satisfacción de poder prestar este servicio a la Iglesia Diocesana, llega a Jerez con espíritu peregrino al corazón de su Iglesia y a la llamada de su obispo y pastor, para que los seminaristas, de los que es también Patrona, tengan la oportunidad de tenerla cerca y rezar con Ella, de que los fieles de toda la diócesis estrechen lazos de concordia y fraternidad, y de que el Adviento se revista de sacralidad con la presencia de las imágenes marianas en las calles. Porque el Adviento es tiempo de esperanza; el Adviento es tiempo de la Virgen.