Fernando Barrera Romero.- La Hermandad de la Defensión está estrechamente vinculada al estamento militar desde su fundación, ya que el 5 de Marzo de 1795, el Regimiento nº 18 de España escoltó la Imagen del Santísimo Cristo de la Defensión, desde el Monasterio de la Cartuja hasta la ciudad de Jerez. El 18 de diciembre de 2010, festividad de la Expectación de María, titular de esta Hermandad, se concedió por parte del Arzobispado Castrense de España, el título de “Castrense” como refrendo de la vinculación antes mencionada.
El 30 de marzo de 2010, Martes Santo, al finalizar la ofrenda por parte del Comandante Militar de Cádiz y Gobernador Militar del Campo de Gibraltar, D. Antonio León Villaverde, la Hermandad de la Defensión nombró Hermanos Honorarios de la Corporación, al Cuerpo Nacional de Policía y a la Guardia Civil, recogiendo las credenciales el Capitán Jefe de la Compañía de Jerez. D. José Miguel Rodríguez Rivas y el Comisario Jefe, D. Andrés Martín Garrido Cancio, respectivamente.
Son varias las décadas de relación y unión entre la Hermandad de la Defensión y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Hemos sido siempre testigos de excepción del trato exquisito que siempre nos dispensan y de la sensibilidad con la que nos distinguen. En estos días tan complicados y difíciles quisiera poner en valor la gran profesionalidad de los componentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil. Admirados tanto dentro como fuera de nuestras fronteras y que día a día luchan para ser garantes de la seguridad de todos los españoles. En ese “todos los españoles” se engloban todos, inclusive aquellos que los ven como una amenaza o simplemente como sus enemigos.
Desgraciadamente en esta Hermandad son innumerables las misas de funeral que se aplican por el eterno descanso de estos profesionales que mueren en acto de servicio. Una vez más somos testigos de su trabajo en pro de los derechos de los españoles, aunque para ello tengan que morir ejerciendo su profesión. Su labor no solo se desarrolla en territorio nacional, sino que también mueren fuera de nuestras fronteras con el objetivo de proteger a España.
Hoy toca hablar alto y claro. El Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil son estamentos ejemplares, formados por profesionales con una alta cualificación. Son instrumentos del Estado que refuerzan y aseguran la democracia de este país y cuya misión principal es la de garantizar la protección de los ciudadanos frente a los actos delictivos que puedan amenazarlos, asegurar el cumplimiento de las leyes llevando ante la justicia a todo el que las incumpla, defender el libre ejercicio de los derechos y las libertades y preservar la seguridad ciudadana. Ante esto lo único que cabe es el reconocimiento y el agradecimiento.
Por último, quisiera aprovechar la oportunidad que me brinda este medio de comunicación para agradecer públicamente y de forma clara y contundente la labor que cada día realizan la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía. Gracias por su labor en defensa de una España mejor, más segura y con más valores. En esta época que nos ha tocado vivir, con el relativismo siempre presente, no cabe duda que los Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado son todo un referente. Pido al Santísimo Cristo de la Defensión que los guarde y los proteja en el desempeño de sus responsabilidades. Gracias de todo corazón a todos los profesionales que velan por España.