Seguimos con esta serie de entrevistas que os traemos desde la pasada semana, en este período estival. Si la pasada semana indagábamos en el mundo de la imaginería, hoy vamos a hacerlo en el de la música cofrade de la mano de José Manuel Castro Viejo.
José Manuel Castroviejo López nace en Sevilla en 1979, es Licenciado en Filología Clásica por la Universidad de Sevilla y Profesor de enseñanza secundaria. Actualmente imparte lenguas clásicas en el IES Francisco Pacheco de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz).
Fundador de la página web www.patrimoniomusical.com , ha realizado numerosos artículos para dicha web así como para otros medios y revistas de ámbito cofradiero, entre ellos esta casa.
Pertenece a las hermandades sevillanas de San Esteban, Cigarreras, Hiniesta y Carmen del Santo Ángel, así como a la de la Caridad, patrona de Sanlúcar de Barrameda.
Alejandro Fernández: José Manuel recientemente acabas de publicar el libro titulado «De Bandas y Repertorios. La música procesional en Sevilla desde el siglo XIX», en el que se recoge un minucioso y detallado estudio sobre las composiciones dedicadas a las cofradías de Sevilla. ¿Como surge la idea de escribir sobre esto?
Jose Manuel Catroviejo: En un principio las investigaciones que realizaba (junto con otros amigos) eran un mero entretenimiento, para satisfacción personal mayormente. Con el paso de los años, visto el volumen de información que ya tenía recopilada, decidí que había que darle forma, para lo cual estuve, aproximadamente, tres años.
No sólo he abarcado el estudio de las composiciones dedicadas a las cofradías de Sevilla -desde un punto de vista cronológico, no musical- sino también las bandas u otros acompañamientos de cada una de ellas.
A.F.: ¿Te ha resultado difícil?
J.M.C: Sí, ha sido muy complicado y laborioso, sobre todo por la falta de bibliografía y documentación así como por la dispersión de la misma.
Para la primera parte del libro, el acompañamiento musical de cada cofradía, he recurrido especialmente a la prensa. He estado durante años acudiendo a la Hemeroteca Municipal revisando diarios desde el último tercio del siglo XIX. En segundo lugar acudí también al archivo de numerosas hermandandes, que contenían información irregular; unas mucha, otras escasa. Finalmente recurrí a archivos de algunas bandas así como a testimonios orales, entre otras fuentes.
La segunda parte, el análisis diacrónico de los repertorios desde el siglo XIX, además de otros avatares relacionados, fue más fácil porque había algo más de información. Aún así, tuve que discriminar muchos datos mal interpretados o sencillamente incorrectos. Recurrí más a o menos a las mismas fuentes que para la primera parte, con las mismas dificultades.
A.F.: ¿Qué has descubierto escribiéndolo?
J.M.C: Muchísimo. Es algo imposible de comprimir en unas pocas líneas, pero, grosso modo, destaco la inexactitud respecto a las marchas que se interpretaban en el siglo XIX. Ni todas eran adaptaciones de piezas clásicas ni «Quinta Angustia» de Font fue la primera marcha dedicada a una cofradía, entre otros lugares comunes.
También quiero hacer hincapié en la falsa creencia de que las bandas de música en los pasos de Cristo o de Misterio no son algo tradicional en Sevilla. Históricamente es más bien lo contrario.
Igualmente, hay una falsa creencia de que los repertorios han sido siempre de sota, caballo y rey. Es del todo falso. Marchas que hoy son consideradas raras, no tradicionales, etc, gozaron en su día de mucha popularidad. Por citar un solo caso, destaco «Cristo de Vera Cruz», de Manuel Borrego, que hasta los años 70 tocaba la mayoría de las bandas, y aunque hoy está revalorizándose, sigue siendo una marcha un tanto anecdótica a la hora de confeccionar un repertorio.
Los seguidores de Patrimonio Musical ya sabían de todo est, pero aún eran datos no conocidos por muchos aficionados y cofrades.
En el libro se pueden encontrar muchos más aspectos así.
A.F.: ¿Desde cuando se interesa José Manuel Castroviejo por la música cofrade?
J.M.C: Es una de las facetas cofradieras que más me llamó siempre la atención, desde pequeño. SI no recuerdo mal, mi primera cinta es una de la Oliva de Salteras con la Virgen de la Estrella en la portada (primer disco que sacó la banda), que contenía marchas como «Virgen de la Estrella» y «El Cachorro» de Gámez, «Gracia y Esperanza» de Albero, «Virgen del Dulce Nombre» de Morales, «Cristo de la Sangre» de Cebrián, «Nuestra Señora de la Oliva», «Aquella Virgen»… Cuando tuve algo más de dinero comencé a comprar más cintas y discos y a interesarme por lo que había detrás: autores, fechas, avatares… Así, uno de los discos que más me ayudó en ese sentido fue «Marchas cofradieras de ayer y hoy. Volumen II» de la Cruz Roja. «La Esperanza de Triana» de Farfán, «Salus infirmorum» de Borrego, «Nuestra Señora de la Hiniesta» de Peralto o «Jesús de la Salud» de Braña me llamaron profundamente la atención.
Poco después me hice con el imprescindible libro de Manuel Carmona (Un siglo de música procesional en Sevilla y Andalucía), que fue el espaldarazo definitivo para mi interés en la investigación de estos temas. Con la lección bien aprendida, encontré de casualidad una cinta de Soria 9 de 1971 que contenía «El Refugio de María», que es posiblemente la marcha que más me ha impactado entre todas las que conozco.
A.F.:¿Como surge la creación de Patrimonio Musical?
J.M.C: A través de incipientes y primitivos foros y páginas web, hace ya casi trece años, varios interesados en la materia fuimos conociéndonos y aunando archivos, intereses y experiencias. Fue un feliz encuentro de inquietudes con frutos evidentes.
A.F.:¿Sois conscientes de que habéis servido para que lo que actualmente suena tras nuestros pasos sea mejor en el ochenta por ciento de los casos?
J.M.C: Sí, es cierto. Somos conscientes de que muchos de nuestros amigos y lectores han logrado (a lo largo de toda Andalucía e incluso más allá) difundir lo que entendíamos que era bueno. Gente que hace diez o doce años era tan aficionada como nosotros hoy día tienen cargo e influencia en diversas hermandades, y se nota.
Paralelamente, muchos directores y músicos se interesaron. Sin su aportación tampoco habría sido posible una mejora tan evidente.
A.F.:¿Qué es lo que hay destacar para que un repertorio sea bueno?
Un criterio primordial: la calidad. Luego, depende mucho de la idiosincrasia de la cofradía, de la calle, la hora, el repertorio y posibilidades de la banda…
A.F.:¿Es la cuadrilla de costaleros la influyente en lo que debe de elegir un fiscal de banda? ¿Debe de haber entendimiento?
Hay mucha variedad y no puedo dar una contestación exacta, pero sí es cierto que la influencia del mundo de abajo antes era mayor. Ahora hay algo más de criterio en muchas hermandades.
Cada integrante de un cortejo debe tener un papel. El del capataz es mandar, el del costalero es andar, el del músico tocar, etc.
De todos modos, la cofradía en la calle es un cúmulo de circunstancias, vivencias y sensaciones. Si la cofradía tiene clara la parcela de cada cual, se puede llegar sin problemas a un entendimiento.
A.F.:Te digo tres autores y me dices lo que se te ocurra de cada uno de ellos… Manuel López Farfán/Germán Álvarez Beigbeder/Pedro Gámez Laserna.
J.M.C: Manuel López Farfán: el más completo.
Germán Álvarez Beigbeder: la excelsitud.
Pedro Gámez Laserna: la perfeccción.
A.F.:¿Es mas fácil elegir el repertorio en una cofradía seria o en una de corte alegre?
J.M.C: Grosso modo, el alegre es más fácil, porque las marchas de corte más alegre son las más abundantes en general. No todas las bandas llevan un buen y abundante elenco de marchas fúnebres.
A.F.:¿Como puede transmitir una marcha? (Si debe hacerlo).
J.M.C: Eso es una cuestión muy subjetiva. Hay muchos factores que pueden hacer que la marcha transmita: la imagen, el lugar, la hora, la interpretación, el estado de ánimo del oyente y del resto de espectadores…
A.F.:Una pregunta personal: la marcha de tu vida.
J.M.C: La que dije antes: El Refugio de María.
A.F.:¿Qué es lo que falta por hacer en la música cofrade?
J.M.C: Hemos avanzado de manera abrumadora en la última década, por lo que si todo sigue su curso natural, se irán puliendo todos los detalles. Si quieres que incida en algún aspecto, te respondería que en una mayor conciencia del patrimonio autóctono, aunque como ya he dicho, vamos por buen camino.
A.F.:Gracias por tu atención.
J.M.C: A ti.