“Cierra la puerta, pero no porque se escape el perro, sino porque van a dejarnos sin nada”
Adrián Zurera de la Peña.- ¿Están nuestras hermandades preparadas para el robo? Son dos ya, los últimos robos producidos en las hermandades de la Cena y del Transporte de nuestra ciudad en tan solo un mes. Sabemos que nuestras corporaciones penitenciales cuentan con un gran patrimonio artístico, pero ¿cuentan también con medidas de seguridad apropiadas para resguardar de los saqueadores nuestras joyas de arte que procesionan en Semana Santa?
Todos nos mostramos en acción de repulsa contra aquellos atracadores de nuestro patrimonio artístico cofrades, pero ¿nos planteamos la colocación de seguridad en actos las propias hermandades? Esta medida requiere de presupuesto, bastante, pero luego sale más caro quedarnos sin la pieza sustraída que mantener un personal de seguridad. Aunque en realidad tampoco es necesario un vigilante de seguridad como tal, sino la colocación de puertas y ventanas blindadas y cuando se encuentre el templo abierto organizar un cuerpo de vigilantes para evitar estas pérdidas.
Nuestro siempre espejo, llamado Sevilla, este asunto lo tienes más que asimilado, ya no por prender un paño en una Iglesia o arrancar de cuajo dedos o brazos a las imágenes titulares. Durante actos extraordinarios y ordinarios, como la misa, se encuentran personal de mantenimiento y/o seguridad para evitar lo qué en Jerez en este último mes está sucediendo.
Muchos en redes sociales escriben “ahora solo toca esperar a que el Señor ponga a cada uno en su sitio”, “perdónalos, no saben lo que hacen”. Efectivamente, que debemos de perdonar y encomendarnos al Santísimo para que no se sucedan actos iguales ni parecidos, pero también tenemos que encomendarnos para que nuestros miembros de la Junta de Gobierno cumplan con su labor de mantener el patrimonio de conservarlo, tomando las medidas necesarias para ello.
Por desgracia, no son las primeras veces que roban en una hermandad, pero esperemos que sí sea la última.